La publicidad apadrinó este matrimonio donde conocidos futbolistas dejan de lado los botines (gambeteando a varios modelos varones) para adentrarse en el mundo de la moda.
Lo cierto es que las grandes marcas apoyan esta preferencia y los deportistas no solo deben esmerarse en la cancha sino también ante la cámara con make up de producción. Algunos de los que aceptaron la aventura: David Beckham, quien supo obtener grandes beneficios en el negocio, Freddie Ljungberg (imagen de Calvin Klein), Fernando Torres, solo por mencionar algunos.
(No iba a postear las imágenes de los modelos en cuestión pero decidí evitarte el trabajo de googlear a estos deportistas).
La edición de junio de la revista Vanity Fair muestra los mejores cuerpos de la Copa 2010 posando en calzoncillos patrióticos.
El portugués Cristiano Ronaldo y el marfileño Drogba son los elegidos para compartir portada. En el interior, nueve futbolistas internacionales entre ellos: el brasileño Kaká, Cristiano Ronaldo, Drogba, el camerunés Samuel Eto’o, el alemán Ballack, el italiano Pato, el estadounidense Donovan, el serbio Stankovic y Muntani, jugador de Ghana.
Ya en las puertas de la Copa Mundial Sudáfrica 2010, las empresas líderes en moda, rescatan a las féminas del rol de observadoras lascivas de polifacéticos deportistas, para ponerlas a la par de la efervescencia futbolística y sumarlas a la hinchada. Las propuestas están dadas en accesorios, calzados, prendas elegantes y las más ocasionales.
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